A través de las voces y experiencias de las comunidades campesinas de las alturas de Huanta (Ayacucho), duramente afectadas por la violencia, Ponciano del Pino explora los entretelones de una historia local cuyo suceso más conocido fue la matanza de ocho periodistas y dos comuneros en Uchuraccay, en 1983. Los relatos incompletos de esta tragedia silencian una amplia historia comunal que envuelve conflictos, silencios, verdades, sentidos de autoridad, estrategias políticas y búsquedas de (un buen) gobierno. El análisis de la memoria de sus protagonistas nos remonta a una lucha por el amparo y protección del Estado, desde el siglo XX, y que a lo largo de los años buscarán, en figuras como Fernando Belaúnde, apoyo para liberarse de la explotación de haciendas. Los estigmas intelectuales y estereotipos culturales que se ciernen sobre estas poblaciones han entorpecido el camino para entender la vida política de estas comunidades y sus luchas por formar parte del Perú. Por ello, Del Pino ubica las memorias en una línea histórica y nacional para comprender el lugar que ocuparon, en los años de violencia política, los comuneros de Huanta. Este libro alienta a no dejar las memorias de las víctimas directas en los márgenes ni que les quiten el derecho de pensar su pasado.