Un chef, aburrido de la cocina, necesita ayudantes en su restaurante. Aparecen tres brujas —Remedios, Ágata y Úrsula— que gracias a hechizos llenos de amor por la vida, diversión y una pizca de locura, le ayudan a recuperar la magia de cocinar. Brujas, embrujo de azúcar, se vuelve un libro–postre que degustamos a cada página, divirtiéndonos como si estuviéramos al lado del chef y las brujas, echando nuestros propios ingredientes al caldero mágico.